¿Es el fin del quiosco como lo conocemos?
📰 Desde los quioscos tradicionales con varias décadas de vida a sus espaldas hasta el concepto fresco y renovado, la carrera por mantener la persiana abierta continúa.
¡Buenas, periodista*!
Son cosas que pasan.
🧚♀️ Suscríbete si te gustaría recibir tu dosis de periodismo quincenal.
Bienvenid@ a Fleet Street: la newsletter sobre periodismo, el sector de los medios de comunicación, las tendencias y el futuro de la profesión con lecturas estimulantes, reflexiones chispeantes, datos, salseos y algún que otro meme.
En La Pija y la Quinqui, la todopoderosa Rosalía decía que la gente que alcanza sus metas da cringe con el autobombo (y no pasa nada). ¿Qué otras cosas nos pueden hacer sentir vergüenza ajena? 30 personas del mundo académico, la moda, los medios, las artes y los negocios comparten su punto de vista para el New York Times. Agüita.
*Puede que no seas periodista como tal, pero eres igualmente superbién recibido/a <3.
📰 ¿Es el fin del quiosco como lo conocemos?
Cuando era pequeña, me encantaba ir al quiosco de mi barrio. Para ser exactos, era una mezcla entre quiosco y papelería. Hubo una época en la que, cada domingo, me hacía con el cómic de las Winx, un grupo de cinco hadas que estudiaba en el mágico y ficticio colegio de Alfea. Recuerdo ver las revistas de moda como algo aspiracional, curiosear los Aarg de la portada de Cuore y comprar los ejemplares de Muy Interesante Junior, que acababan haciendo bulto en el revistero de casa tras hojearlos.
Al lugar, acudían mis padres muy socorridamente cuando pedíamos una cartulina el día antes de entregar un proyecto, cuando necesitábamos reponer bolígrafos y lapiceros o querían comprar periódicos y revistas. Mi madre era más de Mía y mi padre de La Vanguardia, mientras que yo devoraba los números de Como tú y más adelante Bravo y Súper Pop. Me doy cuenta escribiendo estas líneas que uno también es (y se moldea en torno a) aquello que compraba en el quiosco.
Poco a poco, dejé de ir. Ya no necesitaba material para Plástica, ni tenía interés en completar el último test de las revistas de adolescentes. No se veía el periódico los domingos frente a la mesita del sofá y uno de los dos quioscos del barrio cerró. La tradición del papel en casa se esfumó y, durante un tiempo, se vio reemplazada por otras costumbres: leer libros desde la tablet porque era más barato, dejar la lectura de lado o no sentirme nostálgica por todo esto.
Hoy en día, la prensa en papel vive un momento delicado. De acuerdo con la segunda oleada del 2022 del Estudio General de Medios (EGM), la prensa impresa perdió 115.000 lectores en el último año, mientras que el cómputo de lectores de diarios en papel en la última década ha descendido un 61%. En cambio, la franja de edad aumenta; si antes los lectores estrella estaban entre los 34 y 54 años, ahora la horquilla es otra: de 45 a 65 años.
A propósito del descenso en la venta de los periódicos en papel, el presidente de la Oficina de Justificación de la Difusión (OJD) Fernando Valdés afirmaba esto para El País:
¿Qué va a pasar con los periódicos? Depende de cómo se haga. La prensa ha tardado en hacer la suscripción digital y la gratuidad de las webs ha hecho que el papel haya decaído a una velocidad más rápida de lo que el digital crecía. Con las noticias gratis, la competencia era muy desigual.
🎫 Cajas de chicles, revistas alemanas y cromos: ¿Es este el futuro del quiosco?
La situación de los quioscos, lo que alguna vez fue la meca de la prensa en papel, no es más alentadora. Solo en Barcelona, de los 322 quioscos existentes, 259 están adjudicados y hay 53 vacantes, de los que se prevé retirar 31.
Killian Diaz es el propietario del quiosco ubicado al lado de la plaza Francesc Macià, en Barcelona. El establecimiento se encuentra en un lugar estratégico de la ciudad: a escasos metros del emblemático edificio del Grupo Godó, conglomerado editor de La Vanguardia y Mundo Deportivo, y en plena Avenida de Josep Tarradellas. Si bien el quiosco lleva años abierto, Killian lo compró hace tan solo cinco. “Al trabajar aquí, sabía cómo funcionaba el modelo de negocio y en este quiosco es rentable. La gente lee bastante, se vende prensa y tengo repartos grandes a empresas”, explica.
Me sorprendió que lo hubiera comprado en un momento en el que el declive de la prensa en papel era evidente, pero él tenía una respuesta contundente para eso: “Tienes que tener de todo. Cuantas más cosas tienes, más cosas vendes”.
“Tengo revistas de todo tipo: francesas, alemanas e inglesas. Hay mucha gente que viene en taxi a comprarlas. Algunas personas pasan por cuatro quioscos que no tienen la revista que buscan y acaban viniendo aquí porque no la encuentran en otro sitio. Si la tengo yo, la puede tener cualquiera. Eso depende de cómo quieras llevar el negocio”.
Killian explica que, a pesar de vender tabaco, tarjetas de transporte y cajas enteras de chicles, el grueso de las ventas viene por las revistas. “En un día normal, hago 1.000€. Pasan unas 500 personas diariamente por aquí”, afirma. “Cuando hay turismo, multiplica: puedes hacer 1.500 o 2.000 euros en un día”, añade.
Una puerta a más opciones. En julio de 2022, el Ayuntamiento de Barcelona acordó con distintas asociaciones abrir el abanico de productos y servicios en los quioscos para garantizar su viabilidad económica. Si bien la venta de prensa debe continuar siendo la actividad predominante, pueden tener un cajero automático, buzones para recoger compras online o vender café. Aunque Killian ha enfocado el negocio a la venta de revistas, sí que recibe paquetes, ofrece cafés a 1€ de máquina Nespresso y está a la espera de que puedan instalar el cajero en el quiosco.
Cuestión de números. El propietario afirma que vive bien del quiosco, pero que paga muchos impuestos. “El problema es que aquí me paso de facturación. Lo suyo sería disminuir la facturación cada mes para no generar tanto y que no me acribillen a impuestos”, declara Killian. Según el quiosquero, “igual ganaría más dinero teniendo cerrado por las tardes, pero me sabe mal por la gente que está acostumbrada a venir. Todo el mundo cierra por las tardes”, reflexiona.
La excepción a la regla. El quiosco de Killian es uno especial. El buen rendimiento se basa en la diversidad en la oferta, la excepcional localización y la lealtad de un público que ya conoce el espacio. “La situación es complicada. Si te lo sabes montar bien, bien. Eso significa tener de todo. Cuantas más cosas tienes, más vendes”, repite.
☕️ “Nosotros hemos demostrado que el kiosco no está muerto”
Ante esta situación, han surgido nuevos establecimientos con ganas de reinventar el concepto tradicional y potenciar la esencia clásica del quiosco: un lugar donde comprar, hojear y fantasear con las páginas y portadas de prensa y revistas.
News & Coffee es buen ejemplo de ello. “Si vas por las Ramblas o el centro, ves que los quioscos de prensa poco a poco se han convertido en un lugar donde vender souvenirs. Muchos habían cerrado, como el de Passeig de Sant Joan o Francesc Macià, y no encontraban relevo. No se había encontrado esa evolución necesaria para cualquier industria”, afirma Gautier Robial, Managing Director del proyecto.
Así, en diciembre de 2019 dieron una nueva vida al quiosco de Passeig de Sant Joan, seguido de otros siete quioscos repartidos por Barcelona, Valencia, Madrid y Marsella.
Nueva York como inspiración. “Pablo Pardo [el creador] tenía esta visión un poco romántica del quiosco neoyorquino, de un periódico y un café para llevar. En News & Coffee se quería recuperar esta estética”, afirma Gautier.
El secreto de News & Coffee: las revistas. En News & Coffee, apostaron por la venta de un contenido más reposado. Con la entrada de Yaël Hupert al equipo como directora de curación, el quiosco pasó de ofrecer unos 12 títulos a más de 100. Su principal fuente de ingresos son las revistas, alcanzando un 60% de las ventas. “Hoy en día diría que de cuatro clientes que compran una revista, tres no conocían nada sobre esas publicaciones hace seis meses. Vienen, nos preguntan qué hay y se dejan recomendar. Ese es el lenguaje de la curación”, cuenta Gautier.
La curación traducida a la música. Desde News & Coffee han impulsado la curación de una radio en su propia página web y organizan shows en vivo y grabaciones en directo en sus propios quioscos.
El antídoto. Tal y como comparte Gautier, es complicado encontrar una solución desde dentro del propio sector y, de encontrarla, suele ser cortoplacista y enfocada a la diversificación. “Nuestra visión es ser experto en menos cosas, pero hacerlas bien. De hecho, mucha gente, por ejemplo, nos pregunta por qué no hacemos comida para llevar, ahora que está permitido, pero no. Lo nuestro son revistas independientes y café de especialidad”, declara.
“Había una generación que daba al quiosco por muerto y otra nueva que ni lo miraba”, reflexiona Gautier. Por eso, el concepto de News & Coffee gira en torno a crear un momento que marque la diferencia. “Es una luz, una música, un trato con la persona, una estética limpia. Eso hace que la gente se pare y vuelva a encontrar el pequeño placer de explorar y tener una conversación”.
Próximos pasos en el negocio. News & Coffee está más enfocado en compartir la herramienta y el know-how de su propio éxito con gente que quiera usarlos que en crecer. Por eso, han puesto en marcha un sistema de franquicias.
El futuro del quiosco del siglo XXI. “Nosotros hemos demostrado que el quiosco no está muerto”, afirma el Managing Director. Plantean que este tipo de establecimiento, donde prima la curación y el reposo, tiene un sentido tanto en 2023 como en las sociedades en las que vivimos, “más deshumanizadas y rápidas”.
Por cierto, el 23 de febrero a las 20 h (España) charlaré sobre Fleet Street y mi experiencia personal a la hora de crear una newsletter en la plataforma ONA Spain. El encuentro es gratis y online. Si te animas, te espero aquí.
🤓 ¿Qué leer?
Si el futuro de los medios independientes y rentables pasa por implantar muros de pago, ¿por qué no todas las empresas cobran por acceder a contenido periodístico de calidad? Juan Antonio Giner le lanza esta pregunta a Greg Piechota y la conversación no tiene desperdicio. (en español)
Sobre inteligencia artificial aplicada al periodismo y el debate alrededor de su uso:
Las ocho tareas que ChatGPT puede hacer por los periodistas (y sus limitaciones). (en inglés)
¿Puede la IA explicar el mundo? Carles Planes reflexiona en El Periódico sobre lo que la inteligencia artificial puede y no puede hacer en el trabajo periodístico. (artículo bajo suscripción, en español)
El sitio de noticias web Gawker, que, por cierto, echa el cierre, ha hecho un ranking con las mejores y peores cuentas informativas en TikTok. El enfoque del artículo es, cuanto menos, diferente. La mejor nota os sorprenderá. (en inglés)
La herramienta de analítica web que arrasa en las redacciones y puede quitarle el puesto número 1 a Chartbeat. (en español)
🍝 Salseos periodísticos
📱La nueva era de las redes sociales informativas
Si en 2022 había 2.87 millones de aplicaciones móviles disponibles para descargar en Google Play y casi 2 millones en la App Store de Apple, a este catálogo infinito se pueden sumar varias aplicaciones más en fase beta que, seguro, no pasarán desapercibidas.
El nuevo rival de Twitter. Tras ser despedido de Twitter, Alphonzo Terrell, exjefe de redes sociales y editorial, “no quería descansar, sino construir”. Por ese motivo, puso en marcha Spill, una aplicación que pretende convertirse en la plataforma “de facto para descubrir y debatir sobre cultura en todo el mundo”.
¿Cómo? “A través de memes, diferentes puntos de vista, joyas y comunidad”. Spill pretende que los usuarios puedan compartir spills, es decir, random thoughts, organizar eventos (tea parties) tanto online como presencialmente, seguir lo que sucede en la cultura de internet y cobrar si su spill se vuelve viral.
Una especie de TikTok hecho texto. Artifact es el primer producto de Kevin Systrom y Mike Krieger, cofundadores de Instagram y creadores de una nueva empresa donde, tal y como recoge Casey Newton en Platformer, se dedican a explorar las apps sociales de la nueva generación.
La propuesta. Artifact (cuyo nombre representa un mix entre artículos, hechos e IA) surge como un feed donde leer desde piezas de importantes medios hasta reportajes de creadores independientes. En vez de recomendar contenido según las interacciones de amigos y seguidos (como Twitter o Facebook), Artifact mostrará aquello que pueda interesar al usuario basándose en predicciones algorítmicas (como TikTok).
Un vistazo desde dentro.
📣 Extra, extra: Substack es el lugar para dar exclusivas
El periodista Seymour Hersh, galardonado con un premio Pulitzer y autor de exclusivas históricas como los papeles del Pentágono o la matanza de My Lai, compartía una investigación en Substack donde afirmaba que Estados Unidos había volado los gasoductos entre Alemania y Rusia.
Los motivos. Más allá de que la Casa Blanca niega en rotundo lo afirmado por Hersh y la idea, defendida por algunos, de que su carrera está en horas bajas, el reportero de 85 años justifica así su decisión de publicar en Substack:
“He trabajado en grandes publicaciones, pero nunca me he sentido a gusto en ellas. Últimamente, de todos modos, no sería bienvenido. El dinero, como siempre, era parte del problema. The Washington Post y mi antiguo periódico, The New York Times (por nombrar solo algunos), se han visto inmersos en un ciclo de disminución de las entregas a domicilio, las ventas en quioscos y los anuncios en pantalla. Todavía hay muchos periodistas brillantes en activo, pero gran parte de la información tiene que ajustarse a unas directrices y limitaciones que no existían en los años en que yo escribía artículos diarios para el Times.
Ahí es donde entra Substack. Aquí tengo la libertad por la que siempre he luchado. En esta plataforma he visto cómo un escritor tras otro se liberaba de los intereses económicos de sus editores, profundizaba en sus historias sin miedo al recuento de palabras o a los centímetros de columna y, lo que es más importante, hablaba directamente a sus lectores”.
🗞 Periodismo en…
Un día en la televisión. ¿Cómo es trabajar en un programa como ayudante de realización? Antonio García lo explica.
Un vídeo. El equipo de vídeo de La Vanguardia ha publicado un reportaje audiovisual sobre las diferencias en los códigos lingüísticos dependiendo de cada generación. Las frases acabadas en punto, los stickers o el ‘ok’ no significan lo mismo para baby boomers y zetas. Me ha gustado mucho el formato.
Hasta aquí este número. Gracias por leer, siento vuestro apoyo muy cerquita.
Si tienes alguna sugerencia sobre temas a abordar, entrevistas que realizar, curiosidades o inquietudes que resolver, soy toda oídos.
Déjame un corazón, escríbeme un mensaje o búscame en redes para charlar.
¡Nos leemos pronto! 💌
Mar
¡Qué interesante tema el de los kioskos! Me parece que mucho del futuro de los kioskos dependerá del diseño de nuestras ciudades también. Mientras las ciudades prioricen a los autos más que a los peatones, los kioskos desaparecerán más rápido. En México los kioskos siguen siendo un importante oasis en las calles, pero no dudo que haya cada vez menos, no estoy seguro, me pondré a investigarlo. Gracias por despertar esta curiosidad! 🪴